domingo, 28 de mayo de 2023

Primer imperio británico

La era isabelina

La parte del reinado de Isabel I, entre 1577 y 1590, coincidió con una época de gran esplendor en la que se cimentaron los inicios del Imperio británico. Inglaterra comenzaba su expansión ultramarina con John Hawkins y luego con Francis Drake, librando numerosas guerras contra el Imperio español de Felipe II. Drake dio la vuelta al mundo, y fue el tercer hombre en conseguirlo, tras la expedición de Fernando de Magallanes y Juan Sebastián Elcano. En 1579, Drake atracó en algún lugar del norte de California y reclamó para la Corona lo que llamó Nova Albion ('Nueva Inglaterra'), aunque su reivindicación no fue seguida de ningún asentamiento. Los siguientes mapas situaron Nova Albion al norte de la Nueva España. El consultor personal de Isabel, John Dee, fue el primero en utilizar el término Imperio británico.

Los intereses de Inglaterra fuera de Europa aumentaron considerablemente. Humphrey Gilbert siguió el curso de Cabot cuando partió hacia Terranova en 1583 y la declaró colonia británica el 5 de agosto en San JuanWalter Raleigh organizó la primera colonia de Virginia en 1587, en el lugar llamado Roanoke. Tanto el asentamiento de Gilbert en Terranova como la Colonia de Roanoke duraron poco tiempo, y tuvieron que ser abandonados debido a la escasez de alimentos, el duro clima, los naufragios y los encuentros con tribus indígenas hostiles.





lunes, 22 de mayo de 2023

Origen

Crecimiento del Imperio en ultramar

El Imperio británico de ultramar, —en el sentido de la exploración y los asentamientos británicos a lo largo y ancho de los océanos fuera de Europa y las Islas Británicas—, comienza a partir de la política marítima del Rey Enrique VII, que reinó entre 1485 y 1509. Iniciando líneas comerciales para el comercio de la lana, Enrique VII estableció un moderno sistema para la marina mercante inglesa, que contribuyó al crecimiento de los astilleros y la navegación de la isla. La marina mercante aportó las bases para instituciones mercantiles que desempeñarían un importante papel en la aventura imperial posterior, como las compañías Massachusetts Bay Company o la British East India Company. Enrique VII ordenó también la construcción del primer dique seco en Portsmouth, y mejoró notablemente la pequeña Marina Real (Royal Navy).





martes, 16 de mayo de 2023

Geografía y territorio

Fue la región andina, debido a la presencia de la cordillera de los Andes, se caracteriza por la diversidad de su ecología: costas desérticas, parajes tropicales, altiplanos secos y fríos que a simple vista parecen uno de los ambientes menos propicios para la vida del hombre. Sin embargo, los hombres que la habitaron han demostrado a lo largo de muchos siglos, ser capaces no solo de sobrevivir en tales circunstancias, sino también de dominar el medio geográfico y de crear una serie de civilizaciones florecientes. La más famosa de ellas fue el imperio incaico, que ocupó un vasto territorio de América del Sur, que comprende los actuales o partes de los territorios de las Repúblicas de PerúEcuador, occidente de Bolivia, norte de Chile, extremo sur-occidental de Colombia y el noroeste de Argentina.






jueves, 11 de mayo de 2023

Historia

Las crónicas europeas sobre el imperio incaicoEditar

Los primeros vestigios escritos sobre el imperio incaico lo constituyen las crónicas registradas por varios autores europeos (posteriormente existieron cronistas mestizos e indígenas que también recopilaron la historia de los incas); estos autores recopilaron la «historia incaica» basándose en relatos recogidos por todo el imperio.

 Los primeros cronistas tuvieron que enfrentar varias dificultades para poder traducir la historia incaica ya que, además de existir una barrera idiomática, se enfrentaron al problema de interpretar una manera de ver el mundo totalmente distinta a la que estaban acostumbrados.

Esto condujo a que existan varias contradicciones entre los textos coloniales y un ejemplo de ello lo representan las cronologías sobre los gobernantes incas; así, en muchas crónicas se atribuyen las mismas hazañas, hechos y episodios a distintos gobernantes.

Sobre las crónicas del imperio incaico, es importante acotar que sus diversos autores tuvieron ciertos intereses al escribirlas. En el caso de los cronistas españoles, su interés fue «legitimar la conquista a través de la historia», para esto en muchas crónicas se señala que los incas conquistaron usando enteramente la violencia y por lo tanto no tenían derechos sobre los territorios conquistados. En otro caso los cronistas ligados a la Iglesia católica buscaron legitimar la evangelización describiendo a la religión incaica como obra del demonio, a los incas como hijos de Noé y tratando de identificar a las deidades incaicas con las creencias bíblicas o el folklore europeo.

Igualmente existieron otros cronistas mestizos e indígenas que también tuvieron un interés de ensalzar el imperio o alguna de las panacas con las cuales se emparentaban, como el caso del Inca Garcilaso de la Vega, en su obra "Comentarios reales de los incas" quien mostraba un imperio incaico idealizado donde no existía la pobreza, se repartía la riqueza y los recursos se explotaban racionalmente.






lunes, 8 de mayo de 2023

Arquitectura bizantina

La arquitectura bizantina es heredera de la arquitectura romana y la arquitectura paleocristiana. Es una arquitectura esencialmente religiosa, aunque no faltaron los edificios civiles de importancia. Muestra una marcada predilección por el ladrillo como material de construcción (aunque disimulado por lajas de piedra en el exterior y por suntuosos mosaicos en el interior). Aunque utiliza la columna (destaca la sustitución del ábaco por el cimacio), su innovación más característica es el uso sistemático de la cubierta abovedada. Los tipos de bóveda más utilizados son la de cañón y la de arista, pero destaca sobre todo la cúpula, con su característica base sobre pechinas (aunque también se empleó ocasionalmente la cúpula sobre trompas). En cuanto a la planta, la más frecuente en los templos es la de cruz griega, con una cúpula en la intersección de las naves. Es frecuente que los templos, además del cuerpo de nave principal, posean un atrio o narthex, de origen paleocristiano, y el presbiterio precedido de iconostasio, llamada así porque sobre este cerramiento calado se colocaban los iconos pintados.




sábado, 6 de mayo de 2023

Cultura y arte

En los orígenes del Imperio bizantino existió una situación de diglosia entre el latín y el griego. El primero era la lengua de la administración estatal, en tanto que el griego era la lengua hablada y el principal vehículo de expresión literaria. La Iglesia y la educación utilizaban también el griego. A esto debe añadirse que algunas regiones del Imperio empleaban otras lenguas, como el arameo y su variante, el siríaco, en Siria y Palestina y el copto en Egipto.

Con el tiempo, el latín fue definitivamente desplazado por el griego, que, en la primera mitad del siglo vii, se convirtió también en la lengua de la administración imperial. Es significativo que ya en época de Heraclio el título de Augustus, en latín, haya sido sustituido por el de basiléus, en griego. El latín, sin embargo, continuó apareciendo en inscripciones y en monedas hasta el siglo xi.

La invasión del islam y la pérdida de las provincias orientales propiciaron una mayor helenización del Imperio. El griego hablado en el Imperio era el resultado de la evolución del griego helenístico, y suele denominarse griego medieval o griego bizantino. Existían grandes diferencias entre el lenguaje literario, deliberadamente arcaico, y el lenguaje hablado, la koiné popular, muy rara vez utilizada en la literatura.






jueves, 4 de mayo de 2023

Origen

La partición demográfica y geográfica del Imperio oriental tiene mucho que ver con la fisonomía que había adquirido la herencia que dejaron las conquistas de Alejandro Magno (356-323 a. C.). Tras su muerte, el imperio helenístico quedó fraccionado en GreciaAnatoliaMedia, y Egipto. Los herederos (diádocos), mantuvieron enfrentamientos por más de 100 años. Las pujas constantes terminaron debilitando a todos los reinos en cuestión, acudiendo a Roma como mediador entre sendas partes, fueron ocupadas paulatinamente y luego invadidas, entre los siglos i y ii a. C. Lo que a Alejandro Magno le llevó doce años, Roma lo hizo en 150 años: pasaron a ser todas provincias romanas (a excepción de Persia y Media oriental). Los rasgos característicos de todas las regiones eran su origen multiétnico, la pluralidad religiosa (predominaba el politeísmo de cada región), y la gran diversidad de idiomas. Se destacaba principalmente la ciudad que el macedonio fundó, Alejandría, centro de proliferación del saber y la ciencia. En sí, Roma optó en dejar «todo tal como estaba», pero importando recursos económicos, ingenieros, cientistas y pensadores trabajando para su imperio.





martes, 2 de mayo de 2023

El término «Imperio bizantino»

La expresión «Imperio bizantino» (de Bizancio, antiguo nombre de Constantinopla) fue una creación del historiador alemán Hieronymus Wolf, quien en 1557 —un siglo después de la caída de Constantinopla— lo utilizó en su obra Corpus Historiae Byzantinae para designar este período de la historia en contraste con las culturas griega y romana de la Antigüedad clásica. El término no se hizo de uso frecuente hasta el siglo xviii, cuando fue popularizado por autores franceses tales como Montesquieu.

El éxito del término puede guardar cierta relación con el rechazo histórico de Occidente a reconocer al Imperio romano de Oriente como continuación legítima de Roma, al menos desde que, en el siglo ixCarlomagno y sus sucesores esgrimieron el documento apócrifo conocido como «Donación de Constantino» para proclamarse, con la connivencia del papado, emperadores romanos. Desde esta época, en las tierras occidentales el título Imperator Romanorum ('Emperador de los Romanos') quedó reservado a los soberanos del Sacro Imperio Romano Germánico, mientras que el emperador de Constantinopla era llamado, de manera un tanto despectiva, Imperator Graecorum ('Emperador de los Griegos'), y sus dominios, Imperium Graecorum ('Imperio Griego'), o incluso Imperium Constantinopolitanus ('Imperio de Constantinopla'). Está de más decir que los emperadores en Constantinopla nunca aceptaron estos nombres. Esta distinción tampoco existió en el mundo islámico. El imperio bizantino fue conocido por los turcos como روم (Rûm, 'tierra de los Romanos') y sus habitantes como rumis, calificativo que por extensión acabó aplicándose a los cristianos en general, y en especial a aquellos que se mantuvieron fieles a su fe en los territorios conquistados por el islam.

El adjetivo «bizantino» adquirió después un sentido despectivo, como sinónimo de «decadente», debido a la obra de historiadores como Edward GibbonWilliam Lecky o el propio Arnold J. Toynbee, quienes, comparando la civilización bizantina con la Antigüedad clásica, vieron la historia del Imperio bizantino como un prolongado período de decadencia. Influyó seguramente también en esta apreciación el punto de vista de los cruzados de los reinos de Europa occidental que visitaron el Imperio desde finales del siglo xi.

La visión de los bizantinos como hombres sutiles y frívolos sobrevive en la expresión italiana «discusión bizantina», en referencia a cualquier disputa apasionada sobre una cuestión intrascendente, seguramente basada en las interminables controversias teológicas sostenidas por los intelectuales bizantinos.






Imperio Medio

Durante el  Imperio Medio , la definición de "medjay" comenzó a referirse más a una tribu que a una tierra, (aunque las referencia...